Luego de tres mejoras mensuales consecutivas, la industria frenó su recuperación en agosto ya que retrocedió un 0,9% respecto de julio, según el Índice de Producción Industrial (IPI) difundido este miércoles por el INDEC. Adicionalmente, en comparación con agosto de 2019, el sector exhibió una caída del 7,1%.
De esta manera, el descenso interanual fue mayor a la que se había observado en julio, en torno al 6,6%. Este empeoramiento fue explicado, en buena parte, por una mala performance del rubro de alimentos y bebidas, que venía siendo uno de los menos afectados por la pandemia de Covid-19.
Concretamente, la producción de alimentos y bebidas mostró un retroceso interanual del 4,9%, traccionado, fundamentalmente, por la caída en la molienda de oleaginosas. Según datos del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, la elaboración de aceite y subproductos de soja registró una disminución del 19,3%, y la elaboración de aceite y subproductos de girasol presentó una caída del 26,8%.
También tuvo significativa incidencia negativa en el IPI de agosto la contracción del 25,2% que sufrió la industria de metales básicos. Esto se debió, principalmente, por un descenso de la actividad siderúrgica, afectada por la baja demanda de hierro y acero por parte del sector de la construcción y para la producción de hidrocarburos.
Otra fuerte caída, del 30,7%, se percibió en la producción de prendas de vestir, cuero y calzado. Cabe mencionar que, de acuerdo a un relevamiento realizado por el INDEC, el rubro fue el que presentó una mayor proporción de locales sin actividad productiva, ya que un 13,1% del total de locales relevados no pudo operar.
Según fuentes consultadas por el instituto oficial de estadísticas públicas, las ventas a través de plataformas online siguieron siendo insuficientes para compensar la caída en las ventas de los locales comerciales tradicionales.
Entre los datos positivos del mes resaltaron nuevas mejoras en la elaboración de productos de tabaco y productos y sustancias químicas. Paralelamente, se destacó un incremento del 5,2% en la producción de maquinaria y equipo, explicado por un crecimiento del 56,1% en la fabricación de maquinaria agrícola.
Cabe recordar que, en el marco del mes más estricto en cuanto a las restricciones a la producción y a la movilidad, la industria se había desplomado en abril un 33,3% interanual. A partir de allí comenzó a recorrer un paulatino sendero de recuperación, que se desaceleró en julio y se interrumpió en agosto.
El economista de la consultora Ledesma, Gabriel Caamaño, explicó en su cuenta de twitter que el rebote de los primeros meses fue impulsado en gran parte por recomposición de stocks tras un bimestre (marzo-abril) con una baja o nula actividad productiva, pero luego este proceso se frenó ya que «si las ventas no se recuperan tan fuerte como ese rebote de la producción, la producción va a desacelerar y hasta puede devolver algo».
Los números del INDEC indican que la industria manufacturera aun permanece un 7,3% por debajo de los niveles pre pandemia.