En las últimas horas se conoció que la industria a nivel nacional cayó un 9,9% en febrero, en comparación con el mismo mes pero del 2023. En lo que va del año, el desplome alcanzado llega al 21,7%, según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). En San Juan, este último valor es más alto: llega al 40%.
Si bien en febrero, la actividad aminoró la velocidad de caída en el país, luego de una retracción del 27% en diciembre y del 30% en enero, en la comparación mensual también registró un descenso de 7,7%, lo que dejó al descubierto que podría aún no haber encontrado su piso. Al respecto, el titular de la sede local de la Unión Industrial Argentina (UIA), Ricardo Palacios, afirmó que la recesión económica golpeó fuertemente al sector, aunque en menor medida que el de la construcción, por ejemplo.
Sin embargo, la industria local sintió los cimbronazos del parate en las obras. Las empresas vinculadas al rubro metalúrgico, como las que se dedican a la comercialización de cemento y pinturas, también fueron alcanzadas por dicha merma.
«Muchas industrias pararon sus líneas de producción y están haciendo lo posible para no despedir personal. En la industria lleva un tiempo considerable la preparación del trabajador, su capacitación en labores específicos, es por ello que las empresas en San Juan se resisten a prescindir de personal», expresó Palacios.
Asimismo, el referente de la UIA en San Juan destacó que la industria de alimentos y bebidas es otra de las más afectadas «porque son Pymes y no tienen una espalda necesaria». En este sentido, agregó que para este rubro «no hay un mercado externo en el que se pueda operar».